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Pretextos el día de hoy no existieron: ni siquiera el tráfico se detuvo, mucho menos se obstaculizó y aún así el SME hizo acto de presencia en las calles para manifestarse.
Sobre las banquetas de Reforma y con pancartas con consignas y leyendas diversas, los SMEítas dejaron en claro que esto todavía no termina y he de decir con todo el gusto y satisfacción que la mayoría de los conductores pitaron con sus bocinas sus tonadas de apoyo al sindicato y no sé si esto haya sido porque en general la situación de la mayoría de los mexicanos se torna día a día insostenible; no sé si quizá se deba a que ya no se puede ocultar el estado de crisis de seguridad que se vive en la mayor parte del país, tampoco sé si se deba a que en los bolsillos de todos los mexicanos se resiente esa ausencia de bonanza tan cacareada, quizá sea que la mayoría de los usuarios de luz ya están viendo en sus recibos los aumentos descarados en el cobro del servicio. Quisiera decir que el apoyo que escuché venido de los conductores se debe a que ya somos una sociedad con plena conciencia de clase... pero todavía no llega ese momento. Ojalá algún día veamos cristalizado ese deseo.
Mientras tanto, el SME sigue encontrando la manera de manifestarse y difundir que su lucha sigue vigente.
El motivo principal que instó a esta movilización fue la reunión de Martín Esparza con la gente de gobernación. Al momento de redactar estas líneas yo no puedo decir con certeza si algún tipo de resolución y/o acuerdo se haya derivado de la misma, ya se encargarán nuestros camaradas del SME de irnos dando noticias al respecto.
Deseamos lo mejor para el bien no solo del gremio, esperamos lo peor dada la poca voluntad que ha mostrado el FeCalato y en este punto no omito comentar que, por más que trate yo de ponerme en los zapatos de todos los SMEítas que se quedaron sin trabajo, creo no estar errada al llegar a la conclusión de que solo si lo viviera lo entendería de lleno, quizá por eso comprendo que a veces pueda invadir la desesperación, pero si el hecho de apoyarles en la medida de mis posibilidades puede darme cierto 'derecho' de opinar, así como muchos que les apoyamos, instamos a que no desesperen y no se rindan, pues por eso estamos con ustedes y los apoyamos como cada uno de nosotros sabemos hacerlo.
He aquí mi recorrido en imágenes:
Y nos cayó la noche...
* El colofón: Como en otras ocasiones sucede, llegó "seguridad" a resguardar... ¿a los manifestantes?, ¡no!: los que nos manifestamos somos criminales (lo dice la caja idiota); ¿a los conductores?, ¡¡tampoco!! "La ley" llegó a resguardar las instalaciones de los verdaderos patrones y dueños de México: los que no pagan impuestos, los que a fuerza quieren extranjerizarnos, los que han salido beneficiados de verdad en este país, los que se siguen llenando los bolsillos... ¡ah!: y los resguardan con cuerpos de seguridad cuyo sueldo sale de los impuestos que pagamos.
Esto es el verdadero rostro del bicentenario, señores... y me doy por "privilegiada", nuestros hermanos del norte viven, ya de plano, verdaderos thrillers.
Sobre las banquetas de Reforma y con pancartas con consignas y leyendas diversas, los SMEítas dejaron en claro que esto todavía no termina y he de decir con todo el gusto y satisfacción que la mayoría de los conductores pitaron con sus bocinas sus tonadas de apoyo al sindicato y no sé si esto haya sido porque en general la situación de la mayoría de los mexicanos se torna día a día insostenible; no sé si quizá se deba a que ya no se puede ocultar el estado de crisis de seguridad que se vive en la mayor parte del país, tampoco sé si se deba a que en los bolsillos de todos los mexicanos se resiente esa ausencia de bonanza tan cacareada, quizá sea que la mayoría de los usuarios de luz ya están viendo en sus recibos los aumentos descarados en el cobro del servicio. Quisiera decir que el apoyo que escuché venido de los conductores se debe a que ya somos una sociedad con plena conciencia de clase... pero todavía no llega ese momento. Ojalá algún día veamos cristalizado ese deseo.
Mientras tanto, el SME sigue encontrando la manera de manifestarse y difundir que su lucha sigue vigente.
El motivo principal que instó a esta movilización fue la reunión de Martín Esparza con la gente de gobernación. Al momento de redactar estas líneas yo no puedo decir con certeza si algún tipo de resolución y/o acuerdo se haya derivado de la misma, ya se encargarán nuestros camaradas del SME de irnos dando noticias al respecto.
Deseamos lo mejor para el bien no solo del gremio, esperamos lo peor dada la poca voluntad que ha mostrado el FeCalato y en este punto no omito comentar que, por más que trate yo de ponerme en los zapatos de todos los SMEítas que se quedaron sin trabajo, creo no estar errada al llegar a la conclusión de que solo si lo viviera lo entendería de lleno, quizá por eso comprendo que a veces pueda invadir la desesperación, pero si el hecho de apoyarles en la medida de mis posibilidades puede darme cierto 'derecho' de opinar, así como muchos que les apoyamos, instamos a que no desesperen y no se rindan, pues por eso estamos con ustedes y los apoyamos como cada uno de nosotros sabemos hacerlo.
He aquí mi recorrido en imágenes:
Y nos cayó la noche...
* El colofón: Como en otras ocasiones sucede, llegó "seguridad" a resguardar... ¿a los manifestantes?, ¡no!: los que nos manifestamos somos criminales (lo dice la caja idiota); ¿a los conductores?, ¡¡tampoco!! "La ley" llegó a resguardar las instalaciones de los verdaderos patrones y dueños de México: los que no pagan impuestos, los que a fuerza quieren extranjerizarnos, los que han salido beneficiados de verdad en este país, los que se siguen llenando los bolsillos... ¡ah!: y los resguardan con cuerpos de seguridad cuyo sueldo sale de los impuestos que pagamos.
Esto es el verdadero rostro del bicentenario, señores... y me doy por "privilegiada", nuestros hermanos del norte viven, ya de plano, verdaderos thrillers.
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